LA SOLEDAD SONORA
Pájaro errante y lírico, que en esta floreciente
soledad de domingo, vagas por mis jardines,
del árbol a la hierba, de la hierba a la fuente
llena de hojas de oro y caídos jazmines...
¿Qué es lo que tu voz débil dice al sol de la tarde
que sueña dulcemente en la cristalería?
¿Eres, como yo, triste, solitario y cobarde,
hermano del silencio y la melancolía?
¿Tienes una ilusión que cantar al olvido?
¿Una nostalgia eterna que mandar al ocaso?
¿Una nostalgia eterna que mandar al ocaso?
¿Un corazón sin nadie, tembloroso, vestido
de hojas secas, de oro, de jazmín y de raso?
Juan Ramón Jiménez
En esta "soledad de domingo" me ha hechizado este poema de Juan Ramón que, lo confieso, no conocía. Cogí un libro suyo al azar, empecé a leer... ya volveré con algunas otras poesías suyas, porque las hay que te hacen sentir tan, tan identificado.
Y, como cada domingo, estoy triste pero esta vez me siento acompañada y así la tristeza es más dulce, más llevadera.
He tenido una semana extraña, he atisbado un poco entre mi niebla y me he atrevido a entrar y dejar mis pensamientos en algunos de vuestros blogs, y me habéis respondido, y me he sentido muy, muy ilusionada, a pesar de que a veces me da miedo de todo y echaría de nuevo a correr para arroparme en esa niebla que lo desdibuja todo y que por eso me gusta.
¿Sabéis...? También Niebla es un pueblo, en el que yo me crié, un pueblecito de Huelva que tiene más magia para mí que Hogwart, pero otro día os hablaré de mi Niebla con mayúsculas, cuando mi corazón pueda soportar esa nostalgia de la infancia que me come.
Niebla pueblo, niebla brumosa... las dos son lo mismo: un sueño para soñar, un refugio.
Ésta es Niebla cuando el sol se oculta tras sus murallas dormidas...
No podéis imaginar cuánto amo a este pueblo,
lo que siento por Niebla y por el río Tinto,
donde quedaron mis sueños de niña
y el fantasma de la que fui, los que fuimos, sigue vagando
envuelto en una cálida capa de la felicidad inocente que nunca volverá.
Nadie conoce de la melancolía de quien vive alejado de sus raices, mas que aquel que sufre ese semejante desarraigo.
ResponderEliminarSaludos desde El Bierzo
Hay muchos artistas que en su momento se creyeron unos marginados de la sociedad, el tiempo los ha puesto en su lugar. Muchas veces como uno no tiene perspectiva de lo que le sucede, no acaba de comprender y tiene que venir otro a decírselo. Que lo que hace tiene mas valor del que cree. Un artista en plena creación, que mas puedes desear. tu sigue creando, quizas el valor de tu obra mas que en ella misma, se encuentra en el hecho de que la creas. Es algo complicado, pero a ti te han dado (has adquirido) una cualidad, y tienes que ejercerla. Sigue escribiendo, sigue escribiendo poesía y ya es suficiente. Cuando hablamos de gente que ha conseguido el éxito, solo es eso, éxito de cara a los demás. A veces tu crees que son como semidioses, y ellos se consideran perdedores (solo has de ver cuantos escritores famosos han acabado con su vida). Al final todo es relativo y solo importa el hecho de crear, que con él nos realizamos.
ResponderEliminarPosdata: he leido tu blog y el que le dedicas a tu padre, un trabajo magnífico. Y por cierto no te menosprecies tanto, te sorprenderías si la gente opinase de lo que piensa de ti como escritora. Un saludo.
Luis, no había visto tu comentario... te lo agradezco mucho,y más porque me paso por tu blog, comento, pero luego mis comentarios no salen nunca, no sé si lo hago mal o que tú pasas de mirar el escritorio,¡o que mis comentarios, directamente, no te gustan! Yo seguiré poniéndolos, porque me apetece muchas veces, y ahora quiero ir con "el baúl del bisabuelo", el del espejo me fascinó.
ResponderEliminarBesitos
Hola Jana,descubro esta hermosa casa tuya también, en ella me instalo, como un okupa,gracias por tan bellas letras, un placer acunarse en ellas..pasa buen día, gracias, besos de agua..
ResponderEliminarMi querida Jana: Haberte encontrado y dejar por tu parte que compartamos tus sentimientos y tus vivencias es algo entrañable y por lo cual te doy las gracias.
ResponderEliminarMe encantará que hables de NIebla y de su magia pero no aceptaré tristeza por tu parte. A esta señora hay que eliminarla de nuestro vocabulario.
Quiero creer y creo que la esperanza, por mucho que nos cueste debe de estar siempre presente en cada momento de nuestra vida. Siempre.
Te dejo mis brisas y besos llenos de afecto.
Malena
No escondas tus sentimientos, no corras, comparte y disfruta de la compañía, es la mejor medicina para la nostalgia.
ResponderEliminarun abrazo
Querida, querida Malena: no me riñas, permíteme que desahogue un poco de tristeza en el blog, es el único sitio donde puedo ponerme melancólica y eso me hace bien. Últimamente ando floja de ánimos, es natural con la crisis y tantas cosas que nos van decepcionando, pero me hace bien llorar un poquito, a veces, cuando escribo, luego sonrío, me voy a vuestros blogs y me siento como si acabara de entrar en uno de esos clubs que soñaba cuando era niña
ResponderEliminarY es lo que tú decías, la primera vez que entré en tu blog,que cada comentario nos da nuevos bríos e ilusiones.
Mil besos y esas fragantes brisas que tú esparces, preciosa.
Canoso, me encanta que hayas vuelto por aquí, y te hago caso, no escondo mis sentimientos, igual mañana estoy feliz y os salgo por flamenquito, de verdad, me hace bien plasmar aquí un poco de las añoranzas que siento. La vida es tan amarga... ¡que abre a diario las ganas de comer! (esa frase no es mía, es de Jardiel Poncela)
ResponderEliminarBesos.
Mi querida Jana: Me gusta el poema de Juan Ramón Jiménez ( ese gran poeta olvidado casi), y me ha conmovido tu confesión, escrita desde lo más hondo, con espontaneidad y con sinceridad. Pues mira por donde compartimos melancolía, y la verdad, aunque no es agradable la sensación, si nos hace adentrarnos en nosotros y vivir desde el corazón.En un momento se enciende la luz y nos ilumina la esperanza. Pero la vida no es sólo alegría sino también tristeza, y eso hay que aceptarlo. Te diré que me encanta el poema de tu padre que tienes al principio. Me voy a comer el blog que es suyo también.
ResponderEliminarMil estrellas de alegría y esperanza
Sherezade
Querida Sherezade, gracias por pasar de nuevo por aquí, claro que la melancolía no es la mejor de las sensaciones, pero la prefiero a la desesperanza, y también a la indiferencia, esos días en que andas como muerto. ¡Ufff! Y por supuesto que la luz siempre se enciende, a veces eso es lo malo, porque yo soy, como J.Ramón, cobarde, creo que por eso su poema me apeteció tanto ponerlo. Soy cobarde aunque de todas formas lucho y planto cara, pero con mucho miedo a todo.
ResponderEliminarEn el blog de mi padre voy poniendo poemas de su juventud y de su madurez. Algunos son más simples, pero quiero ponerlos de todas formas porque siento que él lo querría así. Mañana si tengo tiempo copiaré una especie de "biografía" que escribí para un homenaje que le hicieron (después de muerto, como siempre se hacen esas cosas) aquí en el pueblo. Es largo, así que me imagino que no todos tendréis tiempo de leerlo, pero también quiero ponerlo allí.
Siempre me enrollo como si escribiera una carta. Yo soy de las antiguas, de las que escribían largas cartas a las amigas y después se morían esperando el correo que no llegaba.
Mil besitos, y una estela de estrellas para ti.
Don vito, gracias por quedarte. Nada de okupa:¡eres bienvenido, café,cervecita, lo que te apetezca! Virtual, pero de corazón. Precisamente ahora yo estoy tomando una birrita y me voy a poner a ver Mentes Criminales, que me gusta mucho.
ResponderEliminarBesos.