LA MECEDORA
Me gustan las tradiciones.
Recuerdo cuando era una niña, sentada en la mecedora de la abuela y ella sirviendo el té, exacta y exquisita en sus movimientos repetidos a lo largo de generaciones.
-En esa mecedora -me contaba- murió tu abuelo.
Yo no recuerdo al abuelo, pero, por lo que fui deduciendo de historias familiares, no me perdí gran cosa.
A mi padre sí le conocí; murió joven.
Algún día repetiré, con mi hija, las palabras tantas veces escuchadas:
-En esa mecedora -le diré- murió tu abuelo.
A mi marido no le he dicho nada, porque también a él le gusta sentarse en la mecedora. Es antigua, pero los muebles, en mi familia, perduran.
Los mantenemos con amor.
Le miro balancearse en la mecedora, como tomando impulso para saltar sobre mí. Las mujeres de mi familia no hemos tenido suerte con nuestras parejas.
Voy a servirle el té. Le acerco la mesita de caoba, otra reliquia de la abuela.
También es una tradición en las mujeres de mi familia mezclar arsénico con el té de ellos.
Ya os he dicho que me gustan las tradiciones.
Las tradiciones son importantes y nunca se deben romper, traen años de descrédito familiar.
ResponderEliminarSaltos y brincos …y no diré nada
Cámara de los Comunes. Londres:
ResponderEliminar- Señor Churchill, si yo fuese su mujer le pondría arsénico en el café.
- Señora Astor, si yo fuese su marido, lo bebería.
Evidentemente, Ester. Por eso mi chica las sigue al pie de la letra.
ResponderEliminarSaltos y brincos, sí.
Buenísimo, Pitt, no conocía esa anécdota.
ResponderEliminarEspero que no estés insinuando nada acerca de mi angelical protagonista.
Besitos.
Ja,ja,ja,...menuda bruja tradicionalista.
ResponderEliminarPeligrosas esas tradiciones familiares.
Está bien, me gustó.
Saludos desde El Bierzo.
Hombre, te pasas llamando a la pobre "bruja tradicionalista", Salvochea. La chica tenía motivos y los explica en poquitas palabras.
ResponderEliminar¡Me alegro de que te haya gustado!
Un abrazo desde Villafranca.
jajaja, que buena tradición...solo en caso de mala suerte con las parejas.
ResponderEliminarUFF! pobre hombre no sabe lo que le espera..
Saludos
Acabo de decirle a Nuria que confío plenamente en ella, mientras quemaba la mecedora del abuelo.
ResponderEliminarSutil, delicado y más que tradicional, histórico, emperadores romanos y papas han sucumbido de esa forma.
Besos apretaos.
Yo creo que fue visto y no visto, Beatriz; se quedó como un pajarito.
ResponderEliminarGracias por pasarte, ya iré a hacerte una visita yo también.
Un besito.
Si, Pelayo, a Dios rogando y con el mazo dando... lo mejor es no dejar cabos sueltos, que luego Nuria puede empezar a pensar cosas... y no te veas, qué futuro.
ResponderEliminarComo ves, es que tu amiga Jana es muy femenina y le gusta seguir las tradiciones a rajatabla.
¡Besos apretaos!
Pues a mí me encanta la protagonista, tiene que haber un fallo en mi educación porque yo no veo nada reprochable en esa tradición :)
ResponderEliminarDeberíamos discutirlo xD
Not, cuando quieras te llevas la mecedora, que la tengo aquí en el patio.
ResponderEliminarSi es que de casta le viene al galgo...
Y, como las tradiciones están para conservarlas, pues...
ResponderEliminarPues sí que lo tenían fácil las mujeres de esta familia. Un "tesito" y a otra cosa mariposa:):)
Besos
Las infusiones son muy sanas, dicen.
ResponderEliminarUn beso.
Genial, Jana, me encanta como utilizas la ironía, beso enorme desde uruguay
ResponderEliminarJajjaa, el comentario de Pitt está perfecto para la ocasión, la conocía la historia esa.
ResponderEliminarQué bueno el relato!!!
Espero solo sea ficción Jana!! El divorcio también te puede venir bien si no... jajaj!!
Besos
Las tradiciones son importantes seguirlas pero también es importante que perduren. Si sigues con el arsénico se van a dar cuenta, prueba otra cosa, eso si, en el té.
ResponderEliminarA mi tb me gustan las tradiciones
ResponderEliminarbesitos
Las tradiciones es como todo hay algunas que están bien y que son bonitas y otras que más vale olvidarlas.
ResponderEliminarEl relato esta bien un poquillo macabro,porque tener envenenarlo por tradición me parece que las cosas se hablan un poquillo antes.
Y tantas y tantas cosas que se repiten: la vida es un eterno repetir. Lo bueno, que a menudo no nos enteramos...
ResponderEliminarNo siempre voy a ser la santa Janita, María, que al final acabaría aburriendo.
ResponderEliminarMil besitos para ti desde un pueblecito muy pequeño de Andalucía.
Eva, no hablaré si no es en presencia de mi abogado, que luego todo se tergiversa.
ResponderEliminarPitt siempre hace comentarios certeros y agudos, la madre que lo parió, es genial, ¿verdad?
Besitos, Eva, guapa.
Ahora hay tantas cosas nuevas que valdría la pena probar... el problema es que la tradición es la tradición, era arsénico mezclado con una pizca de canela y anís estrellado para que no se note el sabor.
ResponderEliminarGracias por pasar, Bubo, un abrazo.
Aniña, guapa, hace siglos que no nos saludamos. Me alegro de que te gusten las tradiciones como a mí, aunque a veces no hay más remedio que renovarse o morir...
ResponderEliminarUn besito, preciosa.
Bueno, Miguel, no es que tenga que envenenarlo por tradición, si él no hubiera estado siempre a punto "de saltar sobre ella", ella no se habría planteado servirle ese té aliñado, es evidente. La culpa, como siempre, es de él. (Como siempre en su familia, aclaro).
ResponderEliminarUn abrazo, Miguel, me alegro mucho de verte por aquí.
Moderato_dos_Josef, cuantísimo tiempo, desde que dejé el blog ya no había vuelto a saber de ti, y creo que has estado tiempo sin actualizar, ¿verdad? o eso me suena. Me alegra un montón ver que sigues por el mundillo bloguero, y te haré una visita enseguidita.
ResponderEliminarMuchos besos bienvuelto, o nuevamente bienvenido, como se diga.
jajajaja que se joa el marido, por sieso! jajajajajaja
ResponderEliminarQue bueno janita, sigue, SIGUE!!!!!
Y que sepas que la poesía anterior me gustó mucho pero me pilló en un día malo y me dejó sin palabras.
Que horrible Jana lo que tuviste que vivir tú y tu hija con el tema del bullying. Es un tema de educación esperemos que en un futuro se pueda solucionar. Por supuesto que quiero leer tu escrito y yo apenas corrija alguna cosa te mando mi novella (no te asustes que es chica) a ver si te parece que da para publicar :) Que tengas un buen finde, besos enormes desde Uruguay
ResponderEliminarQué saladísima eres, Maripili, y se te está ya pegando algo andaluz, de verdad, me lo parece.
ResponderEliminar¿De verdad te gustó la poesía de José Ángel Buesa? Me alegro un montón, yo creo que las poesías de este hombre se entienden muy bien, son muy sencillas y preciosas, una delicia verdadera.
¿Que siga? Me voy a arruinar en arsénico, pero, bueno, si insistes...
Muchos besitos, guapísima mía.
María, pues mañana te lo mando,a ver si te gusta, es cortito, quizá algún día lo alargue un poquito por aquí y por allí, dos páginas más no le vendrían mal.
ResponderEliminarDeseando estoy leer tu novela, y me da igual si es larga, yo soy devoradora de libros a tope, y me encanta tu estilo, así que cuando quieras. Qué guay.
Muchos besitos, preciosa.
Y me pregunto qué tendrán los muebles, más perdurables que sus ocupantes.
ResponderEliminarComo las tradiciones, esas que se resisten a desaparecer, aun a golpe de arsénico.
O será será será, chi lo sà, que aquel marido traidor no mondaba cosa buena...?
Me encanta esta renegrura de texto, Jana
Abrazos
A ver si de ahora en adelante cambia esa suerte, mujer.
ResponderEliminarPD: los zapatos blancos de la imagen si no son iguales, son muy parecidos a unos que tengo.
Hola, Pili, me alegro de verte por aquí. En efecto, como tú dices, un marido que se mece en la mecedora como "a punto de saltar", como una fiera, no merece otra cosa que una tacita de té especialidad de la casa.
ResponderEliminar¡Qué le vamos a hacer!
Un besito, guapa.
Misaoshi, a todo se acostumbra uno, hasta a la poquilla de mala suerte, pero bueno.
ResponderEliminarLos zapatos son la caña, tú es que tienes muy buen gusto para los zapatos, los que enseñas en algunas fotos me encantan.
Ya he leído el comentario que le has dejado a Not A Number, de los dulces. Sí, hija, sí, y encima nos pones los dientes largos, no es justo.
Un besazo.
¡Me ha encantado esta! xDDD
ResponderEliminar¿De dónde la has sacado?
Ese cierto sarcasmo e ironía... no sé tiene algo y por cierto...
Me encanta la protagonista... también me encantan las tradiciones...
No sé si tengo yo un problema... xD
¡¡Besazos Mil Pequeña Gatita !!
Exquisito !!! me encanto !!! tienes un precioso blog y escribes genial !!!
ResponderEliminarUn beso
Aurora